Descubre más acerca de nuestro servicio de pintura electrostática,
diseñado como el complemento perfecto para las fabricaciones hechas en casa.
Principales ventajas de nuestro servicio de pintura electrostática
Somos el aliado ideal en fabricaciones y proyectos metalmecánicos.
Beneficios Principales:
¿Qué es la pintura electrostática?
La pintura electrostática es un proceso de recubrimiento utilizado en una amplia variedad de industrias para aplicar una capa uniforme y duradera de un pigmento sobre una superficie metálica.
Su naturaleza pulverulenta sirve como vehículo para depositarse sobre el sustrato, reemplazando la aplicación de pintura líquida, la cual es un proceso que genera un alto grado de contaminación, suele ser más demorado y, en algunos casos, de difícil aplicación. Este proceso se basa en una carga eléctrica para atraer las partículas de pintura hacia una superficie.
Preparación de la superficie:
La preparación de la superficie es una etapa crítica. La superficie debe estar limpia, libre de grasa, aceite, óxido, polvo y otros contaminantes que puedan afectar la adherencia de la pintura.
Las piezas a pintar se suelen limpiar mediante un proceso de desengrase y limpieza mecánica. Pueden ser sometidas a un proceso de arenado o granallado para eliminar la corrosión y proporcionar una superficie rugosa para generar mayor adherencia con el sustrato.
Luego, se aplica una capa de químico imprimante para mejorar la adherencia y la durabilidad del recubrimiento.
Aplicación y pulverización de la pintura
El proceso de aplicación de pintura electrostática consiste en la carga eléctrica entre el polo positivo (ánodo, en nuestro caso, la pistola) y el polo negativo (cátodo, en nuestro caso, la pieza a pintar), con el fin de adherir el sustrato a la superficie.
La pistola de pulverización utiliza aire comprimido para atomizar la pintura en polvo en partículas finas y, al mismo tiempo, carga eléctricamente estas partículas que se repelen entre sí y son atraídas por la superficie a pintar, creando así una capa uniforme.
Curado de la pintura:
Una vez aplicada la pintura, las piezas recubiertas se trasladan a un horno de curado. El calor generado en el horno funde la pintura en polvo y se convierte en un revestimiento sólido y duradero.
El tiempo de curado puede variar según el espesor del material, y la temperatura se ajusta de acuerdo con las especificaciones e indicaciones del fabricante.
Enfriamiento e inspección:
Las piezas recubiertas se enfrían antes de retirarlas del horno.
Se realizan pruebas de adherencia para verificar el anclaje de la pintura a la lámina, así como también su apariencia la cual debe corresponder al tono de la probeta, (muestra) para asegurarse de que la pintura esté uniforme y libre de defectos.
Empaque y almacenamiento:
Una vez que las piezas han sido inspeccionadas y se ha comprobado que cumplen con las especificaciones de calidad, se empacan y se almacenan de acuerdo con los requerimientos del cliente o del proceso de fabricación.
Nuestros proyectos y acabados en pintura electrostática
